Historia de nuestra escuela
Esta experiencia nace de la casualidad. Mi necesidad de dar clase estuvo siempre. Empecé en colegios e institutos, pero necesitaba dar un salto. El grupo de teatro Amateur “Marujasp” me dio la oportunidad de dar clases de improvisación junto a la FETAM (Federación de Teatro Amateur de Madrid) y conocí a Rafa Soriano, dueño de la sala Espacio en Blanco. Esta colaboración sigue siendo firme hasta el día de hoy. Allí he podido hacer crecer la escuela hasta tal punto que ahora dirijo 7 grupos propios y 3 grupos más por cuenta ajena. Ahora somos una gran familia con más de 100 alumnos. Cuando empiezas deseas dar buenas clases, agradar y enseñar a tus alumnos por partes iguales. Después de los años la ambición crece y tu búsqueda va más allá. Una escuela con personalidad, que ofrezca algo distinto y en la búsqueda constante de una enseñanza integral. Con un lema: no conformarse con lo alcanzado y buscar día a día la excelencia.